La depilación láser es una solución rentable y duradera para eliminar el vello no deseado. Si estás leyendo este artículo, es posible que ya lo hayas considerado en el pasado o que estés pensando en hacerlo. El proceso es no invasivo y seguro, pero, como cualquier procedimiento médico, puede provocar efectos secundarios en algunos casos, que suelen ser quemaduras. No te preocupes, las quemaduras provocadas por la depilación láser rara vez ocurren y hay muchas formas de prevenirlas. En este artículo, analizaremos qué son las quemaduras por láser, cómo se producen y qué medidas puedes tomar para prevenirlas y tratarlas si ocurren. Sigue leyendo y nos aseguraremos de que estés listo para tu próxima cita (1).
¿Qué son las quemaduras por láser?
Una quemadura por láser es un tipo de lesión que se produce en la piel cuando se expone a un haz de láser de alta energía. Estas quemaduras suelen manifestarse como un leve enrojecimiento e hinchazón. Los casos más graves de quemaduras pueden incluir formación de costras, hiperpigmentación, descamación y cambios en el color de la piel. La gravedad de la quemadura depende de varios factores, como el tipo de láser que se utiliza, el nivel de energía del láser, la formación y experiencia del técnico y la sensibilidad de la piel (2).
¿Cómo se producen las quemaduras por láser durante la depilación?
Durante la depilación láser, el haz láser se dirige a la melanina (un pigmento que le da color al cabello) en el folículo piloso. La energía del láser calienta el folículo piloso, lo que lo daña y evita el crecimiento del cabello. Sin embargo, cuando el tratamiento no se realiza correctamente, el haz láser también puede calentar la piel circundante, lo que provoca quemaduras en la piel.
Las quemaduras por láser, aunque son poco frecuentes, pueden ocurrir en las siguientes situaciones:
- El dispositivo o el técnico no están permitiendo el tiempo de enfriamiento adecuado.
- El dispositivo es un dispositivo antiguo que no tiene todas las características de seguridad de los últimos dispositivos de depilación IPL.
- El gel no es compatible con el dispositivo o no está seco antes de iniciar el procedimiento.
- El dispositivo láser no está calibrado correctamente.
- El técnico está utilizando un láser inadecuado en una piel oscura o bronceada ya que la energía del láser se absorbe más debido a la mayor presencia de melanina (3).
¿Cómo prevenir las quemaduras del láser durante la depilación?
Como ya se ha mencionado, las quemaduras son poco frecuentes, pero se pueden prevenir para garantizar resultados óptimos. Si desea evitar quemaduras con láser durante la depilación, estas son algunas de las precauciones más importantes que debe seguir:
- Elija un proveedor de confianza: este es un paso crucial para garantizar una depilación segura y eficaz. Asegúrese de que el proveedor que elija tenga licencia y experiencia en depilación láser. Es importante investigar las calificaciones y la experiencia del proveedor y leer las opiniones de clientes anteriores. Asegúrese de preguntar sobre el tipo de equipo que utilizan (cuanto más reciente sea la tecnología y el equipo, mejor) y asegúrese de que le brinden una consulta y una evaluación de la piel adecuadas antes de comenzar el tratamiento.
- Evite la exposición al sol: debe evitar la exposición al sol durante al menos dos semanas antes de su cita de depilación láser. La exposición al sol puede aumentar el riesgo de quemaduras e hiperpigmentación. También debe evitar el uso de autobronceadores y camas solares.
- Tómate un descanso del retinol: evita usar productos con retinol en la piel al menos una semana antes de tu cita. Probablemente también quieras evitar hacerte tratamientos faciales. La piel ultrasensible después del tratamiento puede aumentar el riesgo de sufrir quemaduras.
- Aféitese antes de su cita: aféitese la zona que se va a tratar antes de su cita. Esto reducirá el riesgo de quemaduras al minimizar la cantidad de vello que el láser debe tratar.
- Evite otros métodos de depilación: Evite otros métodos que puedan causar estrés o dañar la piel, como la cera, la depilación con pinzas o la eliminación química.
- Comuníquese con su técnico: infórmele si tiene alguna afección cutánea, alergia o sensibilidad al calor. Él podrá ajustar la configuración del láser para minimizar el riesgo de quemaduras.
- Evite ciertos medicamentos: algunos medicamentos, como los antibióticos y los antiinflamatorios, pueden aumentar el riesgo de quemaduras. Asegúrese de informar a su técnico sobre cualquier medicamento que esté tomando durante la consulta antes de comenzar el tratamiento.
- Siga las instrucciones de cuidados posteriores: después del tratamiento, su proveedor le dará un conjunto de instrucciones que ayudarán a que su piel sane adecuadamente y minimice el riesgo de quemaduras e infecciones. Estas instrucciones pueden incluir evitar el agua caliente, usar productos refrescantes, evitar el sol y usar protector solar con el FPS adecuado (4).
¿Cómo tratar las quemaduras por láser?
En casos leves, si sufre una quemadura por láser, existen medidas que puede tomar para tratarla. Esto es lo que puede hacer:
- Enfríe la zona: aplique una compresa fría o deje correr agua fría sobre la zona afectada para reducir la temperatura y minimizar la inflamación. Evite el agua o los baños calientes.
- Use aloe vera: aplique gel de aloe vera en la zona afectada para calmar e hidratar la piel. El aloe vera también puede reducir el enrojecimiento y la inflamación.
- Evite la exposición al sol: evite la exposición al sol hasta que la quemadura haya sanado. La exposición al sol puede empeorar la quemadura y aumentar el riesgo de hiperpigmentación. Utilice también protector solar con FPS.
- Consulta con un dermatólogo: si la quemadura es grave o no cicatriza, consulta con un dermatólogo. Este puede recomendarte cremas o ungüentos recetados para acelerar la curación y evitar la formación de cicatrices (5).
En conclusión, la depilación láser es un procedimiento cosmético popular por una razón: proporciona una solución duradera para el vello no deseado. Aunque conlleva algunos riesgos de quemaduras por láser, estos riesgos se pueden prevenir y minimizar fácilmente mediante una preparación adecuada, eligiendo un profesional calificado y siguiendo las instrucciones de cuidado posteriores al tratamiento. Cuando la realiza un profesional capacitado y con las precauciones adecuadas, la depilación láser es un procedimiento de bajo riesgo que puede brindar excelentes resultados. Si está considerando la depilación láser, recuerde siempre que la investigación es el primer paso. Con la preparación y el cuidado posterior adecuados, puede disfrutar de una piel suave y sin vello con un riesgo mínimo de complicaciones. Confíe en la ciencia detrás de la tecnología y en las habilidades de su médico para lograr los resultados que desea.
Referencias:
1. Raulin C, Greve B, Grema H. Tecnología IPL: una revisión. Lasers Surg Med. 2003;32(2):78-87. doi:10.1002/lsm.10124. Disponible en: 4944
2. Adatto M, Halachmi S, Lapidoth M. Depilación láser: una actualización. Dermatol Clin. 2014;32(2):253-261. doi:10.1016/j.det.2013.11.001. Disponible en: 4944
3. Dierickx CC, Grossman MC, Farinelli W, Anderson RR. Daño a los folículos pilosos por pulsos de láser rubí en modo normal. J Am Acad Dermatol. 1996;35(6):889-894. doi:10.1016/S0190-9622(96)90334-5. Disponible en: 4944
4. Kilmer SL, Anderson RR. Usos clínicos de láseres en dermatología. J Am Acad Dermatol. 1993;28(2 Pt 1):163-177. doi:10.1016/0190-9622(93)70022-V. Disponible en: 4944
5. Waibel J, Wulkan AJ, Rudnick A. La seguridad y eficacia de la depilación láser específica para pieles negras utilizando un nuevo láser Nd:YAG de 1064 nm. J Cosmet Laser Ther. 2013;15(3):146-149. doi:10.3109/14764172.2013.794721. Disponible en: 4944